REYKJAVIK

Reykjavik es la capital de Islandia.
El nombre, que significa bahía humeante, se lo puso Ingólfur Arnarson, el fundador de la ciudad, por el gran número de fumarolas que había en aquella época en la zona.

Mezcla de modernidad y naturaleza, es la capital mundial situada más al norte, además de la localidad más importante del país en economía, demografía, cultura e infraestructuras.

Reykjavik podría pasar por una pequeña ciudad de provincias dado su pequeño tamaño y sus construcciones, pero esconde grandes detalles que la hacen muy atractiva para el que la visita: todo queda cerca, no hay apenas contaminación, en verano los días son eternos, su conocida marcha nocturna y un largo etcétera.

Los lugares más destacados para visitar son:

• La Iglesia de Hallgrimskirkja, el edificio más alto de la ciudad y de todo el país, y desde cuyo campanario se tiene una magnífica vista panorámica de Reykjavik y sus alrededores.
  Delante de esta iglesia se encuentra la estatua de Leif Eriksson, hijo del famoso Erik el Rojo.

• La Catedral de Cristo Rey, más conocida como Landakotskirkja, católica.
• La Catedral luterana.
• El edificio del Parlamento o Alþingishúsið, del siglo XIX.
• La Casa de Gobierno.
• El Teatro Nacional.
• La Casa Nórdica, obra del arquitecto finlandés Alvaar Aalto.
• La Perla o Perlan, una estructura de cristal situada sobre seis tanques de aguas termales. El restaurante giratorio que se sitúa en su cúpula goza de fama mundial por la calidad de su cocina.
  En el interior del edificio hay un gran chorro de agua que simula un géiser. Además, en este lugar se ubica el interesante Museo de las Sagas.

• La Casa de la Cultura o Þjóðmenningarhúsið, un centro para la conservación de la cultura islandesa.
• Laugardalur, un parque donde se encuentran el Zoo y la piscina termal más grande del país, Laugardalslaug.
• La Casa Hofði, lugar donde Gorbachov y Reagan se reunieron para tratar sobre el fin de la Guerra Fría.
• El Jardín Botánico, el mayor de Islandia.
• El Lago Tjörnin, en el centro de la ciudad.
• El Museo Folclórico de Arbaer, con casas antiguas reconstruidas.